El problema no es Laprovittola, sino la ausencia de Llull

La derrota del Real Madrid ante Estrella Roja, algo imprevisto a todas luces, dejó un poso de preocupación en la afición blanca y donde se vio que las ausencias se van a notar más de la cuenta.

Pasada ya la etapa de duelo por la marcha de Campazzo a la NBA y, más o menos recuperados de lo que supone no volver a ver en esta temporada a Anthony Randolph, y acostumbrándonos a Alex Tyus, nos queda por ver ahora al «auténtico» Real Madrid, es decir, ese equipo que no tendrá en esta temporada a Thomas Heurtel (confirmado al 100%) y que no tiene mucha pinta de ir al mercado para incorporar a un base a estas alturas de la temporada, por tanto ¿Hay sitio para la esperanza?

Pues el Real Madrid tiene un problema grave en la dirección y no, no vamos a dar caña a Laprovittola, por una razón clara, el argentino ya ha demostrado lo que pueda dar a los blancos y no va a pasar de ahí, es decir, tendrá días en que se saldrá en la anotación por tener buen acierto en el tiro, otros que hará buenas lecturas del 2×2, sobre todo para sus penetraciones y, todo ello, casi siempre a la misma velocidad, por poner un ejemplo automovilístico, es un motor «diesel».

Ahí surge el verdadero problema para el Real Madrid, cuando es necesario revolucionar el partido y Laso no ve soluciones en el banquillo porque Alocén está todavía muy verde para estas batallas y Abalde, aunque cumple, tampoco es lo que quiere Laso para los cambios de ritmo en partido y prefiere volver a confiar en Laprovittola en la dirección.

Y hete aquí que nos encontramos con el verdadero protagonista de la historia, Sergio Llull es la clave para que el Real Madrid no pierda su estilo y no pase a convertirse en un equipo lineal  con un ritmo uniforme (algo que vimos claramente en el encuentro ante Estrella Roja) y que, evidentemente, puede ganar cualquier partido gracias a la calidad que atesoran, pero quita uno de los elementos sorpresivos que siempre ha adornado los conjuntos de Laso: la explosividad y los cambios de ritmo durante el partido.

El propio Pablo Laso comenta en términos parecidos cuando habla de la espera a Llull tras su lesión: «Cuando hay lesionados, el equipo debe tapar esos ‘agujeros’ y nosotros hemos perdido tres jugadores muy importantes, pero hay uno (Sergio Llull), que va a volver y que es  echo de menos por su incidencia en el juego, su versatilidad y su cambio de ritmo».

Así que, ya saben, no piensen en los que se han ido y que no volverán esta temporada, sino en el que tiene que volver y no para ser el elemento diferenciador, ni mucho menos, sino para que volvamos a ver nuevamente a ese Real Madrid, estilo Laso.

Javier Rodríguez