Una charla con Pablo Laso en la soledad del entrenador

Tener una charla de baloncesto con Pablo Laso es una de las ilusiones de quién esto escribe, ni tengo por qué negarlo ni disimularlo porque ya soy un poco mayor para eso, así que tengo que reconocer que hoy, he cumplido parte de ello en una conversación amena en la Comunidad de Madrid y que, como cualquier entrenador que se precie, ha partido de una planificación y de un plan previamente concebido que ha salido de lujo y todo por aprovechar un momento clave: En la soledad de un entrenador.
La CAM adornaba sus mejores galas para un Real Madrid que, tras los discursos, tenía a los jugadores subiendo a saludar a sus aficionados desde la terraza, mientras la mayoría de los privilegiados que estábamos allí les acompañaban hasta masificar el salón anterior. En otra sala contigua, Pablo Laso se sentaba en un sillón aparte, con sus fisios cerca y ahí supimos que había llegado nuestro momento de «ataque» por si quería concedernos cinco minutos de su tiempo que aceptó sin ningún problema, levantándose del sillón y poniéndonos en un sitio donde ambos pudimos hablar tranquilos.
Pablo, ¿Por qué no sale un entrenador al balcón?
No, este es un momento para los jugadores, yo me quedo un poco al margen porque éste es su momento, lo disfrutan y se lo merecen.
Entre esos jugadores hoy falta Felipe Reyes que está con su nueva paternidad ¿Cómo fue ese momento en que conoces la noticia?
A las siete de la mañana entraron mi delegado Pepe y él en mi habitación, era algo que ya teníamos hablado que podía ser en los últimos diez días y esperábamos que no pasara la Copa pero no pudo ser, sabíamos incluso que podía haber pasado en Kazan, que parece que hace mucho que jugamos pero en realidad solo han pasado diez días, o por ejemplo, en el viaje a Málaga, pero lo que sí teníamos claro es que lo veríamos en el momento, por un lado él tenía claro que quería estar y yo tenía claro que si él quería estar lo mejor es que él esté en la familia pero, a pesar de eso, sabiendo cómo es Felipe, no iba a querer perderse nada importante
Cuando lo supe, no le dejé ni dudar, teníamos preparado quién le iba a llevar y a las 7 de la mañana, antes de irse, yo le estaba diciendo a un tío que estaba a punto de ser padre lo que tenía que hacer en el partido de la tarde porque sabía que volvería, ¡¡tiene huevos!!, nunca mejor dicho, esto es la vena del entrenador.
Luego nos fuimos comunicando por la mañana, me dijo que había nacido el crío, que todo había salido bien, que iba a volver y llegó a la charla técnica, fue una noche corta pero con final feliz.
Si cambiamos de veterano e independiente del respeto que siempre dices tener por Chapu, ¿Conoces a algún jugador que sea capaz de estar 37 minutos en el banquillo y salir como lo hace él a la cancha? Por poner un ejemplo, podría recordarnos a Alberto Herreros y como ganó el Madrid aquella liga en Vitoria.
Yo creo que eso es algo mental, hay gente que le cuesta porque tiene que sentirse caliente en el partido, y en el caso del Chapu, seguramente cuando tienes más experiencia será más fácil, por ejemplo, aquel triple de Alberto, que yo estaba en aquel partido, el salió sin haber jugado, en una situación difícil y es parecido a lo de Chapu, saber que tu momento va a llegar y estar convencido de que lo que vas a hacer lo harás bien, en ese sentido nunca he tenido duda. Él es así, conoce los momentos importantes de la temporada y da al equipo un plus de motivación y confianza.
Y ahora, con todo pasado, título ganado, por una vez te gustará jugar dos partidos en tres días entre viernes y domingo por aquello de tener más tiempo para disfrutar la Copa.
Sí, ahora la estoy disfrutando, primero a descansar porque el equipo se merece un par de días de desconexión de no vernos la cara, no por nada, pero así cambiamos el chip, recuperarnos física, mentalmente y a partir del miércoles, lo que viene por delante con la Euroliga y la ACB para seguir siendo competitivos.
Supongo que el reencuentro con la familia también es un momento feliz.
Cuando llegué mis hijos estaban dormidos porque llegamos muy tarde, pero luego los he visto antes de irse al colegio y estaban muy contentos, ahora hay que disfrutarlo y celebrarlo, así que tendré que invitarles a cenar o algo.
Finalmente, muchos niños sueñan con ser como Llull o Felipe, pero ¿un entrenador sueña? o, mejor dicho ¿alguna vez soñaste que podías llegar hasta dónde has llegado?
Yo tenía muy claro cuando dejé de jugar, que tenía que devolver al baloncesto lo que me había dado, ha sido mi vida desde muy crío, sigo diciendo que lo más bonito es jugar pero obviamente no se puede jugar para siempre así que tenía que seguir ligado al baloncesto y a mí me motivaba entrenar en ese momento pero nunca me he planteado retos ni nada a largo plazo, vivo al día a día.
Es cierto que estoy muy contento y orgulloso de mi trayectoria como entrenador pero no solo por los títulos, hago el trabajo que me gusta y me levanto todos los días con la ilusión de entrenar.
Mientras contesta a esta última pregunta, el Jefe de Prensa del Real Madrid nos dice que se tienen que ir ya camino del Ayuntamiento y Pablo Laso me contesta esa pregunta mientras sigue andando al autobús que le lleva a su nuevo destino, cuando finaliza solo podemos darle las gracias por hacernos compartir esos momentos que ahora hacemos con ustedes y del que también nosotros nos sentimos contentos y orgullosos.
